Situación Mal Vista Socialmente


Se que muchos van a pensar o concluir, a partir del final de este relato, que esto es simplemente una situación mal vista socialmente, yo lo considere, lo considero y lo considerare como un delito.

En mi etapa estudiantil siempre ha habido eventos, festivales, actividades o semanas que uno espera con ansias, y en este caso era una fecha y es la famosa “Semana del estudiante”. En la ciudad que me vio crecer, Neuquén, los adolescentes del secundario, mayormente estudiantes de 2do año a 5to año, tienden a ir al lago Mari Menuco a pasar unos días allí. Allí siempre se hace lo mismo, fiestas a la noche o pequeñas juntadas en casas, o incluso se pasa la tarde junto a tus amigos y los demás estudiantes frente al lago donde ponen música y estás todo el día allí hasta que cae la noche. Esta fiesta del lago fue uno de las más importantes ya que era mi última, porque yo era estudiante de 5to año y este sería mi último lago, como dirían los neuquinos.

En un principio, uno llega allí y se divierte con sus amigos hasta que llega la tarde y va a las orillas del lago a compartir con todos los demás. Eso fue precisamente el primer día que llegamos, y en esa tarde unas chicas nos avisaron e invitaron a una fiesta que se armaría a la noche en su casa. Como siempre y como ley que tenemos en nuestro grupo de amigos, aceptábamos todos los planes y luego a la noche nos poníamos de acuerdo a cuál íbamos a asistir, haciendo una votación o viendo que le convenía a la mayoría personas del grupo. En este caso, no hubo mucho debate sobre lo que haríamos ya que lo único que había esa primera noche era esta fiesta a la que nos habían invitado estas chicas. Disculpen, hay 2 cosas importantes que me olvide mencionar, la primera es que las chicas que nos habían hablado a mi y a Salvi (un gran amigo) tenían cierta atracción por nosotros, o por lo menos eso nos dijeron sus amigas. La segunda es que Salvi y yo habíamos tomado hasta el agua del florero y fuimos incapaces de darnos cuenta de las chicas que nos habían hablado, no recordábamos quienes eran.

Una vez cayó la noche, fuimos a la casa en donde se hacía la fiesta, pero yo no había ido con Salvador, él ya estaba allí porque había ido más temprano con otro grupo de amigos. Para mi sorpresa cuando llegamos, la casa estaba llena de gente y aunque mucha gente nos reconozca y salude a mi grupo de amigos, nosotros no somos amigos ni de la mitad de la gente que nos saluda, incluso nos pueden llegar a parecer desconocidos algunos. Ni bien terminó de saludar a todos, aparece Salvi con 2 mujeres detrás de él y me susurra al oído: “Chona estas parecen ser las que nos invitaron a la fiesta, las que nos hablaron a la tarde, hay una que está obsesionada con vos y otra conmigo”.  Luego de decirme esto, quedamos los 4 juntos y hablamos por un rato hasta que una de las chicas se me acerca y me dice de buscar algo para tomar y yo ya sabía un poco por donde iba la mano. Cuando quiero mirarlo a Salvador, él me hace una seña en conjunto que tenemos, que significaba que debíamos separarnos y quedarnos cada uno con las chicas. Yo me voy con Vicky, la chica que quería que busquemos un trago a la barra a buscar uno. Como ella era la anfitriona tenía prioridad entonces la acompañé hasta la barra y ella me dijo que la espere 2 minutos que iba a buscar un vaso para tomar algo, pero cuando la veo volver ella vuelve sin nada y me dice “Vamos a la habitación a buscar mas fernet que no hay más acá”. Sin poder responder o reaccionar ya me había agarrado de la mano y casi que me arrastraba hacia a la habitación, en donde yo sabía que no iba a ver un fernet.

Llegados a la habitación no hizo falta que nos hablemos casi que empezamos a besarnos. No caeré en detalles, pero lo que paso a continuación de eso fue lo que me hizo pensar en que soy un delincuente. Salimos de la habitación, juntos y Vicky me da un beso y me dice “Nos vemos tarde Nacho, no me falles”. Hasta aquí nada raro, el problema fue cuando vino Joaquín, otro amigo, que me dice “Flaco esa mina tiene novio”

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